viernes, 12 de febrero de 2010

Imágenes para el debate

Hay fotos que todos –o la mayoría- tenemos en la memoria. Fotos que no pasan desapercibidas que, como mínimo, te hacen pensar (si pensar, eso que cada vez está menos de moda pero que en teoría nos diferencia de los animales). Pero pensar en qué es lo verdaderamente importante, que se nos remueva la conciencia, que nos sintamos absurdos con nuestros absurdos problemas. ¿Qué más da que el Gobierno quiera subir la edad de jubilación a los 67? ¿Es realmente tan decisivo? ¿Merecen la pena tantas horas de tertulia en la radio? ¿Tantos comentarios online? ¿Podríais decirme, cada uno de vosotros, cinco personas que conozcáis que se hayan jubilado a los 65? ¿DE VERDAD?


Quería colgar cinco fotos que aparecen comentadas en el artículo de Miguel Romero ‘Notas para debatir sobre imágenes del Sur’ para ver si sentimos algo.

1. La niña y el buitre. Premio Pulitzer 1994. Famosísima. “Después de hacer esta foto… ¿por qué no ayudaste a la niña?” Kevin Carter, su autor, se suicidó meses después de recibir el premio. Un amigo cuenta más detalladamente la historia.


2. Los ‘éxodos’ de Salgado. Gran artista. ¿Puede tolerarse tanta belleza –formas, luces, colores- para mostrar la situación desesperada de nuestros iguales?


3. Toscani y la agonía del SIDA. Una imagen real de un enfermo de VIH sirvió de campaña publicitaria para Benetton -manda huevos-. Parece un cuadro renacentista, y el enfermo recuerda a Jesucristo. Pero el sufrimiento es verdadero.


5. Anesvad se atrevió a utilizar como reclamo imágenes de niñas prostituidas con el rostro quemado con ácido. Estas fotos directamente me niego a ponerlas.

Hermosas fotografías con personas que agonizan… ¿Qué os parece?

Como anécdota -si, lo siento, voy a contar una batallita- recuerdo que cuando ocurrió el accidente de Spanair en agosto de 2008 había muchos paparrazzis haciendo fotos a los familiares que lloraban. Bueno, se que no es ninguna novedad, siempre sale gente llorando por la tele cuando han perdido a familiares o algo así. Lo que pasó es que aquel día yo vi la escena con mis propios ojos. Y sentí muchísima vergüenza. Sentí vergüenza porque yo estaba en el bando de los buitres carroñeros. En especial recuerdo a un periodista del programa 'Está pasando' de Telecinco. Y le recuerdo porque jamás en mi vida había visto tan pocos escrúpulos. Empujando y hablando por teléfono diciendo "tengo a fulanito de tal llorando".

Esa es para mí la peor parte de toda la gran industria de la InfCom. No los programas del corazón, donde al fin y al cabo simplemente se habla y se cotillea sobre gente que se presta a eso. Lo peor es hacer negocio con gente que no puede o no está en situación de defenderse. Negociar con personas, tratarles como si fueran cosas, no escuchar, y no respetar el silencio.

1 comentario:

Mary C. dijo...

no puedo estar más de acuerdo contigo, compañera. Brillante post!